UNA TARDE DE OTOÑO

Una tarde de otoño, me encontraba preparando mi café como cada día, pensando y añorando a Álvaro, tenía días sin verlo ya que se encontraba de viaje por trabajo.

Al pensar en él no puede evitar imaginar que entraba en la cocina acercándose lentamente por detrás colocando sus manos en mis hombros teniéndolo tan cerca que sentía su respiración en mi cuello estremeciéndome al instante.

Luego sus manos empezaron a bajar por mis brazos hasta llegar a mis caderas tirando de mi hacia su cuerpo sintiendo su erección, luego lleva una de sus manos a mi entrepierna y empieza a subir lentamente hasta llegar a mi vagina, entra en mis braguitas y empieza a tocarla de arriba abajo y luego en círculos lo que hace que suelte un suspiro y se me seque la boca, el continúa tocándome en mi punto exacto de placer y con su otra mano va subiendo lentamente por mi abdomen hasta llegar a uno de mis senos, lo aprieta suavemente y masajea, sigue subiendo su mano hasta ponerla en mi cuello y haciendo que me gire un poco para poder besar sus carnosos labios.

Después me da la vuelta y me sube a la encimera de la cocina y abre mis piernas para poder acercarse más a mí y besarme en la boca apasionadamente, sus ojos demuestran mucho deseo y pasión, siento su respiración profunda, se aparta y empieza a desabrochar su cinturón y abrir su pantalón sin quitarme la mirada saca su miembro, me toma de las caderas y me empotra de manera fuerte que hace que grite de deseo y empieza a moverse dentro de mí de arriba abajo de manera repetitiva, lo tomo del cuello y lo beso apasionadamente recordando lo mucho que echaba  de menos, sus movimientos son cada vez más rápidos, fuertes y profundos hasta que ambos nos estremecemos y llegamos al orgasmo de manera muy fuerte y ruidosa, abrazándonos fuerte, con la respiración entrecortada manteniéndome entre sus brazos recostada en su pecho respirando ambos al mismo tiempo, luego se incorpora y con un beso tierno me dice lo mucho que me echaba de menos…

Autor y Colaboración MJLM.